Beneficios de mantener un nivel óptimo de saliva en la cavidad oral
La saliva es una secreción que generamos de forma natural y habitual, que contiene un 99% de agua. El 1% restante está formado por componentes orgánicos e inorgánicos que colaboran para mantener nuestra salud oral en condiciones óptimas.
Su principal función es proteger la boca de diferentes patologías, preservando el estado de nuestras encías y piezas dentales. Algunas de estas enfermedades pueden ser la diabetes, el cáncer bucal o la periodontitis. Además, también colabora en la masticación y digestión de los alimentos que consumimos cada día.
La saliva regula el pH de la boca, controlando los niveles de ácidos producidos por la placa dental y ayudando a prevenir la aparición de caries en nuestra dentición. Otro de sus beneficios es que arrastra las bacterias y elimina los microorganismos que se acumulan en la cavidad oral.
Los expertos en la materia afirman que las glándulas salivales de una persona pueden llegar a producir entre 1 y 2 litros al día, alcanzando alrededor de los 34.000 litros a lo largo de toda la vida.
Para un correcto mantenimiento de los dientes y las encías, es muy importante mantener el flujo de saliva. Una secreción deficiente puede provocar sequedad bucal; el consumo de ciertos medicamentos, hábitos nocivos como el tabaco o la deshidratación pueden favorecer su aparición.
Si sientes alguna anomalía en la secreción salival y te preocupa tu salud bucodental, no ignores estos síntomas y acude a nuestros centros dentales en Alcorcón, Móstoles y Fuenlabrada. ¡Te esperamos!